lunes, 8 de abril de 2013

Dolor Magnético

El dolor es como un imán.
Las personas que lo sienten terminan por juntarse; como atraídas.
Atraídas, sí, pero por un dolor verdadero.
No digas que te duele que haya lentejas para comer,
que la televisión no se vea bien...
Di que te duele la situación
que este pobre mundo sufre en su interior.
Que te duela que haya gente con hambre y sin comer,
por favor, no te quedes sin nada que hacer.
El dolor, imantado, termina por atraernos,
hacia otras personas, con las que podemos entendernos.
El dolor es como un vacío en el interior,
un puzle sin empezar,
con todas las piezas por colocar.
El dolor, sentimiento interior,
su existencia agradecer debemos al Creador,
ya que sin él, no sabríamos qué es el amor.

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